Muchas bellezas promueven con entusiasmo la tendencia de usar sostenes en la calle, pero aún así son criticadas por no vestirse hábilmente. Los sujetadores se han convertido en una prenda imprescindible e indispensable en el armario de una mujer. Durante dos siglos, los sujetadores se han transformado y mejorado constantemente en términos de estilo, material y propósito para satisfacer las necesidades de la usuaria. En consecuencia, el concepto de sujetadores también se está expandiendo. Al mismo tiempo, también se impulsa con entusiasmo la tendencia de llevarlos por la calle, no limitándose únicamente a una prenda utilizada para cubrir zonas sensibles. Sin embargo, muchas bellezas pierden puntos por cometer "pecados inocentes" con sostenes en público, porque su forma de vestir no es sutil. En lugar de elegir sostenes con almohadillas gruesas para el pecho, muchas mujeres prefieren los corsés, tanto a la moda como atractivos, porque muestran una cintura delgada y un pecho lleno. Al igual que la moda sin sostén, si usa un sostén como una prenda informal sin saber cómo sujetarlo, es fácil generar controversia.
